terrorismo de marca
en le monde diplomatique del mes de septiembre sale un artículo de olivier roy (director de investigación en el centro de investigación científica de francia) al que llevo dándole vueltas varios días;
la tesis central de dicho artículo es que el grupo terrorista al-qaeda no es una organización internacional con redes estructuradas que trabajan corordinadamente; en realidad es la marca bajo la cual, un grupo de de extremistas organizados ad hoc para situaciones puntuales, presenta sus acciones terroristas; ésto es, que la marca al-qaeda es utilizada con libertad por aquellos que cometiendo acciones terroristas de corte islámico-nacionalista, en realidad no pertenecen a organización alguna, sino que cometen las acciones y saben que tienen la posibilidad de presentarla como una acción de al-qaeda;
la tesis me resulta fascinante, pues establece las bases de un nuevo tipo de movimiento mundial que se podría llamar "terrorismo sin fronteras": no hace falta ideología alguna (bueno, alguna sí, pero parece ser que ya no le hacen ascos ni a los islamistas conversos), excepto ganas de montar una carnicería, alegar confusas motivaciones de índole religiosa-nacionalista y decir "somos al-qaeda": el grupo de terroristas no está dentro de una red mayor, no está conectado con nadie, nunca ha hablado con bin laden o sus subalternos, simplemente es una banda de extremistas reunidos puntualmente para una o varias acciones concretas;
frente a esta desmaterialización de la organización terrorista clásica, los cowboys petroleros ultrafascistas que gobiernan de manera ilegítima los estados unidos siguen comportándose como si estuvirémaos en el siglo XIX: bombardean afganistán o irak (y lo que haga falta en un futuro próximo), persiguiendo una organización que sólo es un nombre de cara a los medios, matando civiles en el intento de eliminar una red fantasma...
por el medio, avanza un teoría: la hipotética unión entre la extrema izquierda mundial y al-qaeda:
[a propósito de esta extrema izquierda y al qaeda]
El enemigo es el mismo: el orden mundial representado por el "imperialismo estadounidense". Al Qaeda fascina a quienes buscan una ruptura con el orden establecido, y aprovecha la casi total desaparición de la extrema izquierda marxista radicalizada, convertida a un altermundialismo que no toca los verdaderos espacios de exclusión.
el artículo acaba con un párrafo extremadamente provocador, y, para mi gusto, altamente desfortunado:
Actualmente se tiende a "sobre-islamizar" a Al-Qaeda y a desestimar su dimensión global, antiimperialista y tercermundista. Sin duda, la lógica del movimiento no será tanto la de encarnar la defensa del islam, como la de convertirse en la vanguardia de los movimientos opuestos al orden establecido y a la hiperpotencia estadounidense.
(glups, ¿quiere ésto decir que al-qaeda va camino de ser la rama extrema y armada de los movimientos antiglobalización? una tesis peligrosisíma...)
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