debe ser que los 80 están de moda de nuevo gracias a una horrible serie de televisión (los 80 según ellos fueron: chapitas, chupas de cuero y... y...), porque sino no me explico la asociación de ideas que he tenido al ver esta foto en el país de ayer:
pasan los años, las décadas, y las tres máscaras (a veces son dos) siguen ahí, en el mismo sitio, inmóviles, atrofiadas, inmunes a los cambios vertiginosos que tienen lugar a su alrededor, fieles a planteamientos que ya estaban oxidados cuando fueron planteados, aferrados a un modo de vida -extorsiones, chantaje, asesinatos, bombas ridículas al azar, redes clientelares de matones, métodos mafiosos, ideologías raquíticas para mentes minúsculas-, ajenos a todo lo que sea hacer un replanteamiento de su propia estrategia, de la razón de ser de su -por ser generosos- "movimiento";
(y yo que sospecho que detrás de esas máscaras no hay nadie, sólo un balón de fútbol con una bolsa del dia con dos agujeros, y bajo las ropas tres maniquíes de saldo, porque, reconozcamos que por muy terrorista que sea uno, lo de salir en la tele haciendo semejante papelón, diciendo semejantes chorradas, tiene que ser muy duro; a no ser que uno sea parte de gran hermano, claro)
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