31 de mar. de 2009

a decepción é unha ciencia exacta
Dou as notas de fin do trimestre. Tres días máis e collemos vacacións. Sempre tomo nota da pelexa encarnizada por un punto ou dous nas calificacións. O que pode pide un tres se ten un dous, e o rapaz que ten un seis chora por un sete en base a exercicios non valorados correctamente, a actitudes positivas cara o traballo non apreciadas ou simplemente por-que-yo-lo-valgo. Todo se discute cando entrego os exames. É unha práctica que fomento. Que me poñan a proba e que busquen os erros nas miñas correcións, nos meus criterios, nas miñas preguntas. Todos os que avaliamos e xulgamos somos humanos e polo tanto falibles. Que polo menos aprendan a poñer en cuestión esa autoridade de merda que nos concede o feito de poñer notas. Cando rematan as clases moitos saen triunfantes, en especial os catros ou catros con cincos que levan un cinco. Pensan que, dalgunha forma pouco clara, saíron gañadores. Non saben que a súa victoria é o único que me satisface de todo este proceso absurdo de poñer exames, notas, recuperacións. Os que non conseguen nada me miran con certa carraxe. A súa decepción é unha medida do meu fracaso. O seu abatimento delimita a inutilidade do meu traballo. Esta profesión está condeada a desaparecer, demasiado sufrimento gratuito para (non) aprender cousas que son irrelevantes case por completo a menos que un quera levar adiante estudios universitarios nunha materia específica.

A gran pregunta para o século XXI: qué cousa é a educación (en especial a secundaria)? e, son necesarios os profesores para conseguila? e, que imos facer con todos eses edificios chamados escolas cando xa non sexan necesarios, que imos facer os tipos que damos clase e que non servimos para nada máis?

30 de mar. de 2009

la hora (idiota) del planeta
¿Soy el único al que esta iniciativa le parece, además de estúpida, profundamente autocomplaciente y onanista ideológicamente hablando? ¿soy el único que se revuelve al ver los vídeos de Alejandro Sanz pidiéndonos que apaguemos la luz por el bien del planeta? ¿soy el único que se sorprende de la capacidad de nuestras sociedades para trivializar cualquier cuestión por grave que sea y convertirla en carne de espectaculillos en los que se apela a los sentimientos para resolver cuestiones que se juegan en el terreno de político? ¿soy el único al que el deslizamiento de la política hacia el terreno de la moral le produce escalofríos de pánico?

(ya sé que no soy el único, pero es que a mi alrededor hay tal entusiasmo con la gilipollez ésta que tenía que desahogarme)

28 de mar. de 2009

anecdotario madrileño



24 de mar. de 2009

expedientes x
Dende o día posterior á victoria do pp, chegan ao meu colexio puntualmente 35 exemplares diarios do xornal "el mundo" que ninguén pediu. O enigma é considerable e invita a pensar mal, non sei de que ou de quen, pero mal mal. Falei cos de administración, coa directora, co xerente, co secretario. Ninguén sabe de onde saen os 35 exemplares nin quen os paga. Amontonados na secretaría, rematan formando unha pila de 175 ao chegar o venres. Nese momento, a profesora de plástica de 4ª de primaria, acompañada por dous rapaces da ESO, os recolle e os leva á súa clase para utilizalos nas súas clases. Non como lectura, claro. Malia a xustiza poética na resolución final desta situación, sigo preguntándome a que se debe este tirar xornais por tirar. Ao mellor ten algo que ver con esta nova.

19 de mar. de 2009

bolonia, preguntas y respuestas






[Fuente:kaosenlared]

17 de mar. de 2009

religión como moral, moral como política y política como religión
El pp vuelve a sacar a los obispos a la calle. Si viviéramos en un estado laico la noticia sería anecdótica. Pero en un país en el que los ministros juran sus cargos ante un crucifijo tamaño king-size, en el que existen los sacerdotes castrenses y en el cual el ministerio de educación paga el sueldo de los profes de religión sin poder elegirlos, el tema no es baladí. El motivo, esta vez, tras el apocalipsis de la familia y el lavado de cerebro que se lleva a cabo en las aulas tras la asignatura de EpD, es el del aborto. El tema es de los realmente complejos y graves. Para mí, lo suficiente como para que cualquiera de las posturas ante él esté salpicada de dudas considerables respecto a su fundamento último. Pero la postura del episcopado es, intelectualmente hablando, ofensiva, grosera y lindante con la de compañeros de viaje como los ayatollahs iraníes o los rabinos ultraortodoxos israelíes.

Pongámonos en el lugar de los obispos: si la religión destila una moral determinada, entonces ésta debe ser la norma que rija la vida pública. Si la norma que debe regir la vida pública es trascendente, remitiendo a una verdad última, entonces la política, que es la herramienta con la cual los humanos dirimimos nuestras diferencias en el plano simbólico para no andar a tiros, carece de contenido. Si la política carece de contenido, entonces sobran el poder legislativo, el ejecutivo y el judicial. Por lo tanto, bastaría poner a un obispo al frente del gobierno y dejar que él legisle, ejecute y juzgue de acuerdo a la norma suprema. Por lo tanto, las opciones son dos: democracia o teocracia. Como lo segundo no va a ser, saquemos los crucifijos y las monjas y las familias numerosas a la calle y comparemos a los niños con los linces y a las mujeres que abortan con delincuentes que sólo merecen la cárcel.

Entendámonos. Las juergas callejeras que promete la curia española sólo son la manifestación de una impotencia. Que la disfruten.

16 de mar. de 2009

resaca post-electoral (I)
Temos catro anos. Saber o que hai é fundamental para darlle a volta. A realidade non mola. Pero adaptarse comodamente ás súas reglas co pretexto da insignificancia do propio actuar é situarse no campo da reacción radical. Xoguemos a algo.

La política parlamentaria, tal como se practica hoy, no consiste en absoluto en fijar objetivos derivados de algunos principios y en darse los medios para alcanzarlos. Consiste en transformar en opinión consensual resignada (aunque evidentemente inestable) el espectáculo de la economía. Por sí misma la economía no es ni buena ni mala; no es el lugar de ningún valor (salvo el valor de la mercancía y el dinero como equivalente general). Como tal, "va" más o menos bien. La política es el momento subjetivo o valorizante de esta exterioridad neutra. Pues las posibilidades cuyo movimiento pretende organizar están, en realidad de antemano circunscritas y anuladas por la neutralidad externa del referente económico. De tal manera que la subjetividad general se remite inevitablemente a una suerte de impotencia malhumorada, cuya vacuidad encubren las elecciones y las frases hechas de los jefes de partido.

[Alan Badiou, la ética, fragmento do cap. III "la ética, figura del nihilismo"]

15 de mar. de 2009

galician state of mind




I cant seem to face up to the facts
Im tense and nervous and i
Cant relax
I cant sleep cause my beds on fire
Dont touch me Im a real live wire

Psycho killer
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away
Psycho killer
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away

You start a conversation you cant even finish it.
Youre talkin a lot, but youre not sayin anything.
When I have nothing to say, my lips are sealed.
Say something once, why say it again?

Psycho killer,
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away
Psycho killer
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away

(* spoken interlude in french *)

Psycho killer,
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away
Psycho killer,
Quest que cest
Fa fa fa fa fa fa fa fa fa far better
Run run run run run run run away

Oh oh oh oh oh oh oh oh....

14 de mar. de 2009

pactos contra natura o menos
Durante los últimos cinco años todos los cargos del partido popular se han dedicado, entre otras cosas, a descalificar con toda la artillería posible la labor de gobierno del partido socialista, a cuestionar su legitimidad democrática y a gritar a los cuatro vientos que el gobierno de Zapatero estaba llevando a cabo cosas como la balcanización de España, la destrucción de la familia, la intromisión en el derecho de los padres a educar a sus hijos, la negociación con terroristas, el abandono de las víctimas del terrorismo, la destrucción de la economía española o la eliminación de puestos de trabajo patrios en favor de extranjeros indocumentados. Por no hablar de la teoría de la conspiración según la cual el PSOE y ETA están detrás de los atentados del 11-M.

Es decir, el partido popular ha venido a decirnos que en los últimos cinco años las tesis de la extrema derecha son las suyas. Que el gobierno legítimo salido de las urnas en 2004 y 2008 es en realidad un peligro para los propios españoles que lo eligieron. El partido popular ha dejado en el aire que "ésto" está en una situación límite que alguien tiene que corregir. Y todos sabemos qué entiende la derecha española por "corregir" una situación.

Con todos éstos antecendentes, el PSOE, en un acto que parece una suerte de hara-kiri político anuncia un pacto en Euskadi entre su partido y el partido popular. Parece ser que el argumento principal es que es un pacto "natural". Lo más "lógico". Lo mejor "democráticamente".

De pronto éstos cinco años de confrontación llevada más allá de cualquier límite político normal parece que no han existido. El partido popular es una opción lógica para pactar. Una opción válida. La opción correcta.

Con ello, el PSOE da por buenos todos los insultos, todas las acusaciones, toda la gresca callejera que el PP ha montado estos años de la mano de obispos, nostálgicos del franquismo y grupúsculos de extrema derecha encumbrados a la gloria mediática. Viene a decirnos, aquí no ha pasado nada, éstos no son mala gente, no son nuestros adversarios reales, estamos en el mismo barco.

Vienen a decirnos, nuestro adversario real es el PNV. Ésos que se han limitado a votar los presupuestos éstos cinco años. Ésos que nos han apoyado en el tema con ETA. Ésos que nos han sacado las castañas del fuego en votaciones apuradas en el congreso. Ésos que nos han defendido de los ataques rabiosos del PP. Ésos son nuestros adversarios de verdad.

Vienen a decirnos, somos unos mierdas que, por contentar a cierto electorado indeciso que puede votar al PP, vamos a ir de su mano. Vamos a ponernos la etiqueta de "constitucionalistas". Vamos a ganarnos el respeto de la COPE y del Mundo y de La Razón y de Libertad Digital. Vamos a ser la izquierda de derechas que les mola a ellos.

Vienen a decirnos, si eres de izquierdas, ya sabes quienes somos: el partido de mierda que pacta con la peor derecha de Europa. La vergüenza de cualquiera que los haya votado estos años insoportables. Los hijos de puta que prefieren vender la moto del patriotismo de pandereta a transformar la sociedad haciendo políticas verdaderas de izquierdas.

Por qué todo tiene que ser tan nauseabundo.

11 de mar. de 2009

escoitado na conferencia de onte de fernández liria
(Textual ao 99%)
"Un estado de dereito [refírese ás democracias occidentais] cunha lei de extranxería é un campo de concentración inverso onde as finanzas internacionais fan a labor das cámaras de gas."

"O que Kant chama a mancha pútrida da humanidade é esa tendencia a considerar que un é bó simplemente porque non tivo a oportunidade de facer o mal."

"Todos os gobernos democráticos realmente de esquerdas que houbo durante o século XX remataron igual: cun golpe de estado."

(Todo a propósito do intento (desesperado? de eso ía inicialmente a conferencia) de buscar a conexión kantiana co pensamento marxista, o vínculo deste coa ilustración e a necesidade de expurgar en Marx a influencia hegeliana.)

Algunhas ligazóns interesantes aquí, aquí e acá. Como anécdota, resaltar que o Fernández Liria foi guionista do programa de televisión "la bola de cristal".

9 de mar. de 2009

gran torino: historia de un (otro) doblaje criminal
El otro día fui al cine a ver gran torino la última película de Clint Eastwood. Está bastante bien, Clint se autoparodia como justiciero seudofascista, se ríe un poco de los viejos medio gagás que votan a los republicanos y sueltan frases como "estas son las cosas que hacen grande a este país", y hace su pequeña aportación a ese gesto tan bonito que es aceptar el mundo que está ya encima de nosotros (habitualmente éramos nosotros los que estábamos sobre él, pero esa es otra historia), lleno de inmigrantes asiáticos y tradiciones culturales que, gracias a al arte de la gastronomías podemos comprender en unas pocas lecciones. Bien alto. Suena a despedida y a canto del cisne y a testamento cinematográfico en plan "que otros sigan, yo ya no doy más de mí, estoy viejo, agotado, quiero morir tranquilo". Pero no son las virtudes cinematográficas de la película (básicamente una: te ríes bastante) lo que quiero glosar aquí, sino el delito que supone el doblaje cuando uno va a ver una película extranjera.

Veamos. Uno paga por ver a unos actores actuar de acuerdo a un guión más o menos decente. De eso va el cine. Parte de la actuación es el cómo hablan. Parte fundamental de su presencia escénica, diría yo, por eso odio vehementemente a Penélope Cruz, por poner un ejemplo sin maldad. El actor, dicen los entendidos, debe quemar la pantalla con su presencia. Debe abrasar nuestros ojos. Pero claro. Si uno se enfrenta a Clint Eastwood con todas esas arrugas que dicen "confieso que he vivido", con ese ceño fruncido y esa mirada de ira angustiada, lo último que espera es que abra la boca y uno escuche a Constantino Romero (que tiene una voz bastante guay, pero no). Y claro. Si uno no paga por escuchar a CR (ya puede hacerlo gratis gracias a la publicidad de colchones Lomónaco), ya no digamos a la banda de dobladores tarados que se encargan del resto del reparto, en especial de los pandilleros coreanos e hispanos, que hablan de una manera tan marciana que uno no sabe si realmente está perdido en la traducción o si la traducción lo va a perder a uno de un momento a otro.

Si la excusa es mejorar la comprensión de la película, alguien debería decir a los responsables de doblaje que en realidad lo que están haciendo es levantar un muro insalvable entre ella y el espectador. El doblaje, de hecho, es un muro que no hay forma de esquivar. Se te cae encima continuamente, cada palabra como un ladrillo en los oídos (perdón por la metáfora barata). Al primer minuto ya estás fuera de la película, sintiéndote estafado, timado, engañado y a punto de morir ahogado por el derrumbamiento. Después de dos horas tienes ganas de levantarte de la butaca, acercarte a la pantalla y decir alguna barbaridad. Pero no, te lo tragas todo. Llegas entonces a casa y, tras poner el bittorrent a funcionar, mientras escuchas los mensajes institucionales contra las descargas ilegales, sonríes para ti mientras piensas, ésta va por timarme siete euros, de nuevo.

5 de mar. de 2009

john ashbery
En el "the believer" del mes de febrero leo una interesante entrevista a John Ashbery, poeta norteamericano cuya obra desconocía totalmente. Buscando un poco por internet, en uno de los miles de blogs que hablan de él encuentro en un comentario este poema. Mañana, a la librería de guardia corriendo.

UNA OCULTA BENDICIÓN


Sí, ellos están vivos y pueden tener esos colores,
Pero yo, en mi espíritu, estoy vivo también.
Siento que debo cantar y bailar, para decir
Esto de alguna forma, que el conocerte sea entregado a mí.

Y yo canto entre la desesperación y el aislamiento
De la oportunidad de conocerte, de cantarme a mí
Que eres tú. Como ves,
Tú me acercas a la luz de una manera

Que nunca pude haber esperado, o sospechado, tal vez
Porque siempre me dices que soy tú,
Y con razón. Los grandes frutos amenazan.
Yo soy tuyo para que mueras conmigo, para desear.

Nunca puedo pensar en mí, te deseo
Para una habitación en la que las sillas siempre
Tienen las espaldas de cara a la luz
Impuestas en las piedras y los caminos, los verdaderos árboles

Que parecen brillar para mí cruzando rejas ante lo tuyo.
Si la salvaje luz de este día de enero es real
Yo prometo serte fiel
A ti, a quien no ceso de recordar.

Recordándote para olvidar. Recordándote para ir más allá de ti hacia otro día
Sobre las alas de un secreto que nunca sabrás.
Sacándome de mí mismo, en el camino
Que la circunferencia pastel del día me ha asignado.

Te prefiero a ti en el plural, te quiero a ti.
Debes venir hacia mí, todo pálido y de oro
Como el rocío y el aire.
Y así me inunda esta repentina exaltación.

"Pirografía: Poemas escogidos de John Ashbery 1957-1985", Visor 2003. Traducción de Martín Rodríguez-Gaona.

3 de mar. de 2009

análise pos-eleccións: a volta á orde
Dicía Alan Badiou nun post anterior que a política -para el- era "a acción colectiva organizada, conforme a certos principios, que intenta desenvolver no real as consecuencias dunha nova posibilidade que se atopa rexeitada polo estado de cosas dominante". As eleccións ás que acabamos de asistir supoñen un golpe brutal a esa "posibilidade rexeitada polo estado de cousas dominante". Porque non hai definición mellor para a tímida alternativa que xurdira na última lexislatura en Galicia tras os vinte (sesenta en realidade) anos de dominación da dereita en Galicia. Un vello axioma político di que a dereita prefire a inxustiza ao desorde. E a sensación que teño e que, da man dun xornal de por acá (que curiosamente se di "de Galicia") e dalgúns medios de por alá (todos os que están pensando), creouse unha especie de sensación colectiva de que estaba acontecendo un gran desorde: unha foto nun iate de fai cinco anos, unha anécdota noxenta cun bus de xubilados en Baiona -que debería ter suposto a dimisión do tipo que organizaba os mítines do bloque-, unha polémica liliputiense en torno ao automóbil do presidente e o ruido mediático deses falsos mártires da nova dereita agrupados en torno a Galicia bilingüe foron suficientes para transmitir esa suposta sensación de desorde a unha cidadanía que -agora o teño claro- cre que as cousas deben cambiar o xusto para que parezca que cambian -non máis-, e que os que mandaron toda a vida son os que deben seguir mandando.

Políticamente, o "cambio" electoral é un desastre. A involución que vai vir en materia de urbanismo, defensa da nosa paisaxe, servicios sociais, promoción do galego, medioambiente, I+D+i, cultura ou educacion vai a situarnos nos anos finais do século xx. Iso, malia todo, creo que podería soportalo, e, en certo sentido, ata é bó para que certos sectores paralizados da esquerda patria collan e se levanten dunha vez.

Democráticamente, o "cambio" electoral é unha catástrofe. Esa idea fundacional da democracia como lugar baleiro (a imaxe grega dese ágora esperando a ser ocupado temporalmente) que non pertence a ninguén nin é propiedade de ningún axente político, social ou relixioso, que é problemático, suxeito a discusión permanente e inestable reventa por completo con esta volta do pp ao poder. E reventa porque eles consideránse os ocupantes naturais dese espazo baleiro. As celebracións dos militantes e simpatizantes do partido son transparentes: as de alguén que está recuperando algo que lle corresponde por dereito e que perdera de forma incomprensible. A dereita (a galega e a española), pola súa orixe política e social considera que o seu papel é mandar, ter o poder. Hai xente que nace para mandar e outra que non. E esta volta democrática daqueles que se cren os propietarios naturais do poder (o político, claro, o outro xa é seu dende fai moito) é, polo tanto, unha traxedia. Todo ese exército de "fillos de", "irmáns de", "sobriños de", "amigos de", educados e crecidos no seo das familias que medraron á beira do franquismo e que permaneceron intocables tras a transición, voltan a onde cren que lles corresponde. Ao sitio natural "da xente de ben", daqueles que cren no "bilingüismo harmónico", deses que opinan que o importante é ser "serios" e falar das cousas "que lle preocupan ao cidadán da pé". A súa concepción da cidadanía é a que ten un pastor coas súas ovellas. A da política, a de quen está convencido de ser o dono natural de todo. A do poder, unha maraña de favores e redes clientelares que se alimentan mutuamente.

Isto é o que hai. Este é o non-país no que vivimos.
Benvidos a 1980, again.

2 de mar. de 2009

desastre
Preparémonos para enfrentar la que nos espera. O intentemos ver el lado bueno: a ver si espabilamos de una vez.