Un joven rememora durante una semana sus años en común con un amigo que se halla en un hospital al borde la muerte. Se refiere a él como El Muerto. Asentado en un hotel de la costa portuguesa hace pequeños viajes en los que rememora fragmentos de las vidas de ambos desde su infancia en una aldea de Extremadura hasta el día de hoy. El pasado, el presente y el futuro se mezclan en una especie de ensoñación en la que no termina de quedar claro si hay un lamento por los años vividos o un suspiro de alivio por dejar atrás una época de confusión e incertidumbre. De fondo, una extraña historia de amor con la hija de una adinerada familia portuguesa que parece vislumbrarse como lo único realmente "real" en la vida del protagonista. También una confrontación soterrada entre dos formas de vida antagónicas: la plácida infancia rural frente a los años absurdos de juventud en Portugal. Un tono narrativo que roza el coma, frases breves sin intención sentenciosa, capítulos mínimos en los que se recoge una impresión insignificante sobre algún acontecimiento irrisorio, fragmentos de textos extraídos de otros libros, ambientes y paisajes apenas esbozados... un libro extraño que aspira a despojarse de cualquier tipo de retórica para alcanzar algo parecido a la descripción de una parálisis vital y emocional absoluta. El retrato de una desubicación, de un extrañamiento, de una soledad que nos son conocidos. Los nuestros, en mayor o menor medida.
2 de xul. de 2006
julián rodríguez, ninguna necesidad
Un joven rememora durante una semana sus años en común con un amigo que se halla en un hospital al borde la muerte. Se refiere a él como El Muerto. Asentado en un hotel de la costa portuguesa hace pequeños viajes en los que rememora fragmentos de las vidas de ambos desde su infancia en una aldea de Extremadura hasta el día de hoy. El pasado, el presente y el futuro se mezclan en una especie de ensoñación en la que no termina de quedar claro si hay un lamento por los años vividos o un suspiro de alivio por dejar atrás una época de confusión e incertidumbre. De fondo, una extraña historia de amor con la hija de una adinerada familia portuguesa que parece vislumbrarse como lo único realmente "real" en la vida del protagonista. También una confrontación soterrada entre dos formas de vida antagónicas: la plácida infancia rural frente a los años absurdos de juventud en Portugal. Un tono narrativo que roza el coma, frases breves sin intención sentenciosa, capítulos mínimos en los que se recoge una impresión insignificante sobre algún acontecimiento irrisorio, fragmentos de textos extraídos de otros libros, ambientes y paisajes apenas esbozados... un libro extraño que aspira a despojarse de cualquier tipo de retórica para alcanzar algo parecido a la descripción de una parálisis vital y emocional absoluta. El retrato de una desubicación, de un extrañamiento, de una soledad que nos son conocidos. Los nuestros, en mayor o menor medida.
Un joven rememora durante una semana sus años en común con un amigo que se halla en un hospital al borde la muerte. Se refiere a él como El Muerto. Asentado en un hotel de la costa portuguesa hace pequeños viajes en los que rememora fragmentos de las vidas de ambos desde su infancia en una aldea de Extremadura hasta el día de hoy. El pasado, el presente y el futuro se mezclan en una especie de ensoñación en la que no termina de quedar claro si hay un lamento por los años vividos o un suspiro de alivio por dejar atrás una época de confusión e incertidumbre. De fondo, una extraña historia de amor con la hija de una adinerada familia portuguesa que parece vislumbrarse como lo único realmente "real" en la vida del protagonista. También una confrontación soterrada entre dos formas de vida antagónicas: la plácida infancia rural frente a los años absurdos de juventud en Portugal. Un tono narrativo que roza el coma, frases breves sin intención sentenciosa, capítulos mínimos en los que se recoge una impresión insignificante sobre algún acontecimiento irrisorio, fragmentos de textos extraídos de otros libros, ambientes y paisajes apenas esbozados... un libro extraño que aspira a despojarse de cualquier tipo de retórica para alcanzar algo parecido a la descripción de una parálisis vital y emocional absoluta. El retrato de una desubicación, de un extrañamiento, de una soledad que nos son conocidos. Los nuestros, en mayor o menor medida.
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