saroyan (y 3)
el adolescente que reparte telegramas con la noticia de la muerte de soldados en el frente durante la 2ª guerra mundial habla con su madre tras su último reparto:
- [...] Yo pensaba que los hombres dejaban de llorar cuando se hacían mayores, pero parece que es entonces cuando uno empieza, porque es entonces cuando uno empieza a darse cuenta de todo. -Se interrumpió un momento y su voz se volvió todavía más sombría.- Casi todo lo que descubre un hombre es malo o triste.
[...]
- La pena. Supongo que fue la pena lo que te hizo llorar. Un hombre no es un hombre de verdad si no tiene pena. Si a un hombre no le ha hecho llorar el dolor del mundo solamente es medio hombre, y en el mundo siempre habrá dolor. Saber ésto no quiere decir que un hombre tenga que desesperar. Un buen hombre busca que las cosas le causen dolor. Un hombre necio ni siquiera verá el dolor, salvo en sí mismo. Y el pobre desgraciado que sea un mal hombre infligirá más dolor a las cosas y lo extenderá por donde quiera que vaya.
(Dice peke que saroyan estuvo de moda hace unos treinta años pero que después se le consideró un autor menor; para mí este "la comedia humana" es uno de los mejores libros que he leído en los últimos años, y ya estoy deseando leer "el joven audaz sobre el trapecio volante")
Publicar un comentario