nunca máis
el sábado por la tarde lo paso en ourense; a la vuelta a vigo, ya de noche, por la autovía nos vamos cruzando con los autobuses que van a la manifestación de hoy en madrid; impresiona que, de pronto, entre la niebla que cubre la calzada en la zona comprendida entre porriño y ponteareas, vayan saliendo, uno tras otro, como hormigas gigantescas, rompiendo la oscuridad y la niebla, más de 50 autobuses, ordenadamente; veo el interior iluminado desde mi coche, no van seres heroicos, ni mártires de la causa, ni iluminados o "gente del partido" que acuda fiel a llamada del líder: van personas normales que se van a chupar siete horas de autobús, prácticamente sin dormir para volver al día siguiente (sé de sobra lo que es llegar a madrid tras no dormir toda la noche, no tener una ducha para deshacerse del desagradable calor del autobús, estar muerto de sueño y darse de frente con el frío seco de la ciudad y los malos modos de los camareros en las cafeterías a tempranas horas de la mañana: un asco) justo tras la manifestación. No hay intenciones heroicas o martirológicas: más bien ésto parece la expresión intuitiva de que ciertos hábitos democráticos que aquí aún estaban en pañales se van convirtiendo en algo normal; la posibilidad de expresar la disconformidad con una acción de gobierno de manera pacífica y multitudinaria va calando convirtiendo a la población en un proceso lento en esa cosa que se llama sociedad civil y que tanto hemos echado de menos por estos pagos durante tanto tiempo;
me llaman mis compañeros de attac desplazados a madrid a las 11.30 de la mañana: el trayecto que va de la plaza de neptuno a la plaza de atocha está totalmente cubierto de gente a falta de media hora para el comienzo oficial de la manifestación; enciendo la tele y veo: en la 1 la gala número 50.000 de OT, en la 2 una misa, en A3 un programa de zapping, en la gallega una entrevista política a alguien que -misteriosamente- no parece miembro del gobierno central o autonómico, en tele5 un programa infantil, en el plus el previo al zaragoza-murcia de 2ª división, en localia tv espacios de telecompra: me dan igual las televisiones, lo que está ocurriendo va a espaldas de la miopía de sus directivos, sólo lamento no estar allí en medio, recorriendo el paseo del prado entre gritos y risas.
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