O diario de Willy Sifones

los carnets, el amor
Algunas de las anotaciones de Camus en sus carnets referidas al amor y al sexo me han sorprendido de una manera quizás extraña: no estoy de acuerdo con lo que afirma, pero algo me dice que quizás sea yo el que esté equivocado.
Pongo unas cuantas:

La vida sexual fue dada al hombre, tal vez para desviarlo de su verdadero camino. Es su opio. En ella todo se adormence. Fuera de ella, las cosas recobran su vida. Al mismo tiempo, la castidad extingue la especie, lo que tal vez sea verdad.
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Idea: rechaza todo lo que se le ofrece, todas las posibilidades de felicidad que se le presentan debido a una exigencia más profunda. Malogra su matrimonio, se compromete en amoríos poco satisfactorios, espera, tiene esperanzas. "No sabría definirla, pero la siento". Así hasta el final de su vida. "No, nunca podré definirla".


La sexualidad no conduce a nada. No es inmoral pero es improductiva. Puede uno entregarse a ella mientras no desea producir. Pero solamente la castidad va unida a un progreso personal.
Hay un momento en que la sexualidad representa una victoria; cuando se la separa de los imperativos morales. Pero poco después se convierte en derrota, y sobreponerse a ella es la única victoria posible: la castidad.
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Las sexualidad desenfrenada lleva a una filosofía de la no significación del mundo. Por el contrario, la castidad le devuelve un sentido (al mundo).
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Vivir con las propias pasiones es también vivir con los propios sufrimientos, que son su contrapeso, su correctivo, su equilibrio y su compensación. Cuando un hombre ha aprendido -y no en teoría- a permanecer solo en la intimidad de su sufrimiento, a superar su deseo de evasión, la ilusión de que otros puedan "comprenderlo", le queda ya poco por aprender.
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El deseo físico brutal es fácil. Pero el deseo unido a la ternura requiere tiempo. Hay que atravesar toda la comarca del amor antes de encontrar la llama del deseo. ¿Será por eso que siempre cuesta tanto desear lo que se ama?

Estoy confundido. No entiendo esta apología de la castidad.